¿Cómo nace la idea de componer una canción para San Josemaría Escrivá?
Me lo pidió el padre Miguel Pedrós, párroco de la Catedral de Abancay, con motivo de la entronización de una imagen de San Josemaría en el retablo mayor de esa Catedral. Yo no quería componer un himno, sino algo más sencillo: una canción fácil de aprender y de retener. Espero haberlo conseguido.
¿Se inspiró en algo en especial?
Yo había estado presente en la beatificación de Jacinta y Francisco, pastorcitos de Fátima, y me llamó mucho la atención una canción sencilla, que la gente repetía con facilidad, que hacía referencia a los acontecimientos de Fátima. Es lo que quise hacer con la tonada de la canción. Para la letra, me inspiré como es lógico en la espiritualidad del mensaje de San Josemaría Escrivá, sobre la santificación en la vida ordinaria. Es fácil de descubrir.
¿Le guarda particular devoción a San Josemaría Escrivá?
Tengo la suerte de haberlo conocido en vida, el 1 de noviembre de 1972, en Portugal. Desde entonces, su imagen se me quedó muy grabada. Le pido favores en cualquier circunstancia, grandes y pequeños.
Me imagino que la labor que desarrolla en Abancay será tema constante de su petición
San Josemaría le urgió a Mons. Enrique Pèlach, hoy obispo emérito de Abancay, a que saque adelante el seminario. Le dijo: “Tendréis sacerdotes para Abancay y para otros lugares.” Esto se ha cumplido al pie de la letra. A la fecha se han ordenado 115 sacerdotes salidos del seminario de Abancay. La mitad de ellos trabajan en otras diócesis. Por eso pienso que Abancay le debe muchísimo a San Josemaría. Yo vine el Perú con esa seguridad. Cuando hay alguna dificultad, que nunca faltan, pienso inmediatamente en esas palabras y me quedo tranquilo.
CANCIÓN DE SAN JOSEMARÍA
ESTRIBILLO
D
San Josemaría,
- A - - - - - - D
amigo de Dios,
G - - - - - - - Em
ruega por nosotros,
A7
óyenos.
ESTROFA
D
1. Suenen las campanas
Bm
en Cuatro Caminos.
Em
Es un son alegre,
A
un eco divino.
G - - - - - - - - - - - - A
Dios nos llama a todos
G - - D - - A7
a seguir a Cristo.
2. Es Cristo que pasa
hoy a nuestro lado
que nos quiere santos
en nuestro trabajo
y nos hace apóstoles
de nuestros hermanos.
3. Deja con tu vida
la huella profunda,
que no sea estéril,
que sea fecunda:
con tu luminaria
a todos alumbra.
4. Éste es el camino
que nos lleva al cielo
como lo han andado
aquellos primeros:
viejo y nuevo siempre
como el Evangelio.
5. Hijos de Dios Padre
siempre en su presencia,
rezan y trabajan,
trabajan y rezan,
mientras santifican
todas las tareas.
6. Campos y ciudades,
aulas y oficinas,
campos de deporte,
fábricas y minas:
todos son altares
para nuestra Misa.
7. Hombres y mujeres
sanos y enfermos,
clérigos y laicos,
jóvenes y viejos:
Dios a todos llama
en su seguimiento.