Voluntarios chilenos construyen casas para víctimas de terremoto en Perú

La fundación chilena “CasaBásica”, en coordinación con la Prelatura de Yauyos y la asociación “Proyecto Peruanos”, construyó 39 casas y una capilla en la provincia de Cañete, para víctimas del terremoto del pasado 15 de agosto.

Mons. Ricardo García durante la bendición de las casas

El sábado 12 de enero en los centros poblados menores de “Las Palmas” y “San Pedro”, del distrito de San Luis de Cañete, el Obispo de la Prelatura de Yauyos, Monseñor Ricardo García, bendijo las casas y la capilla. Asistió también el presidente de la Región Lima, Nelson Chui Mejía.

El terremoto, además de 510 muertes, dejó muchos hogares damnificados y familias enteras quedaron en la calle al caer sus edificaciones de adobe. Según el Instituto de Defensa Civil peruano, 16.669 viviendas quedaron destruidas y 85.000 personas resultaron damnificadas en las regiones de Ica y Lima.

Cada casa era construida por un grupo de cuatro o cinco muchachos

La fundación CasaBásica tiene experiencia en Chile en la construcción de casas prefabricadas de madera. Han desarrollado un modelo de casa de tres ambientes, hecho de madera tratada de pino. Cada casa está valorizada en mil doscientos dólares. Para conseguir pagar los 40 módulos, CasaBásica recurrió a la generosidad de empresas y ciudadanos chilenos. La Prelatura de Yauyos, por su parte, consiguió algunos donativos de cooperantes nacionales y Proyecto Peruanos realizó el trabajo previo de reconocimiento de la zona y empadronamiento de las familias.

CasaBásica movilizó a 63 universitarios chilenos, quienes se encargaron de construir los módulos, a lo largo de dos semanas de intenso trabajo. Francisco Prieto, el líder del grupo de voluntarios chilenos comentó que “el diseño de las casas construidas responden a un diseño donde se privilegia tanto los lugares privados como públicos para resguardar la privacidad y pudor de la familia”.

Carreta transportando material de construcción

Los pobladores también colaboraron, encargándose, entre otras cosas, de facilitar el transporte del material, que era distribuido a los diversos lugares en carretas tiradas por burros.

Álvaro Alliende, presidente de “CasaBásica”, durante la ceremonia de inauguración, recordó que la misión de la fundación es buscar mejorar la calidad de vida de la gente, no sólo construyendo casas sino construyendo familias.

Al final los pobladores agasajaron a los voluntarios e invitados con bailes típicos como festejos negroides y sayas andinas .